Queretaro y Bernal

             Este fin hice algo que nunca había hecho y para ser honesto tenía miedo, manejar en carretera, y lo más emocionante es que viajé solo. El viernes fui a un evento en apoyo de una sociedad civil, vendieron cena típica potosina y un señor hizo un show de imitación y comediante, estuvo divertido, estaba un poco preocupado porque el huracán Patricia estaba cerca y el viernes estaba lloviendo muchísimo. Mi carro no es muy alto y se cuela el agua por el techo.

                El sábado temprano me alisté, dormí bien esa noche, desayuné un plátano y compre cacahuates en el Oxxo, entre San Luis y Querétaro hay 200km, mi trabajo esta después de los primeros 20 por lo que ahí fue mi primer y única parada antes de agarrar camino, puse gasolina unos $450 y compré una bebida energética por si las dudas. Empecé a manejar para eso de las 10am el camino es sencillo al principio cruzas una tipo mini sierra y hay bastantes curvas, me le “pegué” a una Tacoma a la que nunca me acerqué mucho pero venía a unos 120km/h de repente 140, no lo perdía de vista más que en las curvas y me entretuvo la primer mitad del viaje, en ningún momento me dio sueño, después en un poblado me vi en la necesidad de rebasar a la troca y a un carro, parecía un honda deportivo, pero no tenía marca ni modelo en él. Lo siguiente que contaré no es algo de lo que me enorgullezco y dudo mucho que lo vuelva a hacer, se creó un lazo de camaradería entre los dos carros y empezamos a acelerar, 120-140-150-160-170-180 para esto yo ya tenía todo el cuerpo tenso y estaba con un nivel altísimo de adrenalina, llegué a manejar hasta los 190km/h y el otro carro no sé si tenía nitro o algo así me sacó la delantera por mucho, igual unos 210k/h. Estoy casi seguro de que me regañarán por poner esto aquí pero ya pasó y extremé precauciones en su momento. Aparte que fue muy divertido y es algo que nunca había hecho. Entrando a Querétaro el carro se puso en el carril lento y me dejó pasar, ambos levantamos solo el puño con el pulgar arriba y nos saludamos amistosamente.

                Llegando a Querétaro fui al tec y estuve esperando a Carlos unas dos horas, como me compre un celular nuevo el viernes andaba emocionado estrenando, bajando apps, aprendiendo los trucos de cada versión de Android entre otras cosas, también estuve paseando por el campus y viendo los lugares en los que hace cuatro años viví un Cipa-caipa, que memorias tan bonitas y luego con esto empezó de nuevo el tema en mi cabeza de que se sentiría volver a vivir algo así, ¿sería igual o que tan diferente sería? Que pasaría, como lo asimilarías, harías de nuevo tan buenos amigos como antes. Lo apreciarías igual, aprenderías tanto? No sé son miles de preguntas que me dejaron embobado varias horas. Cuando Carlos salió de su curso fuimos a Antea, una plaza comercial nueva, el centro de Querétaro ya lo conozco y había posibilidades de lluvia (que por suerte no llovió) entonces en mi carro no es muy conveniente ir a un lugar así por las calles. En centro comercial es muy bonito y el más grande de Latinoamérica, caminamos un rato, comimos pizza, cerveza, café, platicamos, recordamos, nos actualizamos, reímos y vimos a la gente, compramos un par de cosas y en la tarde fuimos a su depa, pre copeamos un rato y nos fuimos a un antro que está de moda. Al principio no nos dejaron entrar, a esos lugares es difícil entrar si no tienes reservación, si no compras botellas, si van nomas dos hombres, no sé, políticas, pero después de unos minutos logramos convencer al cadenero. El lugar es en un tercer piso y el techo se quita en la noche por lo que me gustó mucho, aparte se ve el centro de la ciudad muy bella, nos divertimos bastante, no es necesario ir a ligar a un antro para divertirse, nos juntamos con un grupo de personas y nos estábamos riendo y riendo, cuando estas en otra ciudad te importa menos como bailas o lo que hagas.

                En la mañana por alguna razón despertamos a eso de las 7 de la mañana, preparamos un café y nos fuimos al jardín a platicar, desayunamos y nos fuimos a Bernal, está a unos 40min, paseamos, comimos gorditas, turisteamos un rato, es un pueblo muy bonito como para ir a turistear o para olvidarte un rato de la ciudad. Es de lo que más me gusta de vivir “acá en el Sur” que hay muchas cosas muy cerca, regresamos a Querétaro, me tomé un café y regresé a San Luis. Fue un buen fin de semana. He de admitir que no salió barato, de pura gas fueron casi $1000 pero valió la pena, si quiero seguir viajando tengo que empezar a buscar una manera  más económica, este fin de semana es el día de muertos y hay muchos lugares muy cerca que son “de los mejores para pasar el día de muertos” o muy tradicionales que me gustaría ir, pero el que le sigue a este quiero ir a Vallarta a visitar a mi abuela, me gustaría ganar más dinero o trabajar solo cuatro días.

                Hoy le marqué a mi abuela, está muy bien, muy feliz, ya empieza a hacer frio y se empieza a sentir más la ausencia de la familia en mi vida.

-Gil-